Cuando hablamos de fisioterapia es inevitable asociar la visita a la clínica de rehabilitación con una sesión de masaje. El porqué de dicha asociación no tiene mucho sentido a decir verdad. Los centros de fisioterapia o rehabilitación, no se encargan exclusivamente de dar masajes para rehabilitar el cuerpo. De hecho, es posiblemente lo que menos se haga. Nada tiene que ver, no obstante, un masaje realizado por un fisioterapeuta con una función rehabilitadora, con los masajes relajantes que procura un masajista. De hecho, si se pretende molestar a un fisioterapeuta, nada como llamarle masajista.
A pesar de dicha asociación, la mayoría, somos conscientes de que acudir a un fisio y hacer sesiones de rehabilitación, implica otra serie de tratamientos, entre los que podemos encontrar métodos de aplicación manual como los masajes, o terapias de otro tipo como las apoyadas en infrarrojos, ondas de choque o la punción seca, de la que vamos a hablar en este artículo. Para hacerlo con propiedad, hemos consultado con nuestros amigos de Avance, centro de rehabilitación con una larga trayectoria en todo tipo de tratamientos de fisioterapia.
Las razones que conducen a visitar a un fisioterapeuta son infinitas. Desde una lesión deportiva hasta un accidente de tráfico o, por padecer dolencias crónicas y enfermedades que requieren de tratamientos rehabilitadores. Uno de los tratamientos más eficaces para las personas que padecen dolor muscular crónico, es la punción seca. Esta técnica, se ha convertido en los últimos años en una de las herramientas más eficaces con las que cuenta la fisioterapia para tratar diversos tipos de afecciones musculares.
Esta técnica, consiste en la inserción de agujas estériles de acupuntura en los denominados puntos gatillo. Estos puntos concretos, son las zonas dolorosas y tensas que tiene el músculo o tejido conectivo. El tejido conectivo, es para quien no lo tenga muy claro, uno de los cuatro tipos de tejidos básicos que componen el organismo. Su misión es proporcionar el soporte estructural necesario y conectar los demás tejidos y órganos del cuerpo entre sí proporcionando la conectividad necesaria. Mediante las punciones secas, se persigue aliviar la tensión muscular, reducir el dolor y mejorar la función de músculos y articulaciones.
Cómo funcionan las punciones secas
Para entender cómo funciona este tratamiento, vamos a explicar con mayor precisión en qué consisten esos puntos gatillo que hemos mencionado con anterioridad. Entender este concepto es fundamental para entender en que consiste la punción seca. Por lo tanto, debemos saber que los puntos gatillo, consisten en áreas hiperirritables que se encuentran en los músculos esqueléticos pudiendo causar dolor, debilidad muscular y rigidez. Los puntos se formas cuando los músculos se tensan y contraen reiteradamente, pudiendo limitar el flujo sanguíneo y, provocando acumulación de ácido láctico (responsable de las molestas agujetas) y otros elementos del metabolismo en el tejido muscular.
Mediante la aplicación de la punción seca, se dispone de una técnica efectiva para el tratamiento de los puntos de gatillo miofasciales, puesto que pueden llegar a los puntos gatillo más profundos de este tejido y aliviar la tensión muscular. Los puntos gatillo miofasciales son especialmente dolorosos y su tratamiento bastante difícil. Pueden causar síntomas como dolor referido, debilidad muscular y limitar el movimiento, por lo que una punción seca, puede ayudar con la reducción de la inflamación y mejorar la función muscular, lo que directamente reducirá el dolor y la rigidez del músculo.
En definitiva, una punción seca puede ayudar a la relajación del músculo cuando está tenso, restaurar el flujo sanguíneo y liberar esos puntos gatillo, induciendo una mejora en la función muscular, la reducción del dolor y la rigidez.
A la hora de hacer una punción seca, el profesional de la fisioterapia, deberá buscar los puntos gatillo en el músculo o el tejido conectivo. Tras identificarlos, insertará una aguja de acupuntura esterilizada en el mismo. Esta aguja se inserta y se retira rápidamente con la finalidad de producir una respuesta de relajación en el músculo o el tejido.
Dentro del tratamiento, podemos distinguir dos tipos de punciones secas: la seca y la húmeda. En la primera de ellas, se utiliza, como ya hemos dicho, una aguja de acupuntura esterilizada con la finalidad de estimular el punto gatillo. La aguja se inserta y retira de manera rápida para estimular la respuesta deseada de relajación del músculo o el tejido conectivo. En el segundo caso, la punción húmeda, conlleva una pequeña cantidad de anestésico en la inyección en el punto gatillo. Está técnica se utiliza por lo general en pacientes que presentan una mayor sensibilidad al dolor, pudiendo ser más efectiva que la punción seca propiamente dicha.
Desde su descubrimiento en los años setenta del siglo XX, las punciones secas se utilizan de forma amplia y habitual en fisioterapia. Se trata de uno de los tratamientos más indicados para aliviar afecciones musculares y del tejido conectivo entre las que podemos incluir dolor lumbar, de cuello y hombros, síndrome del túnel carpiano y fascitis plantar, entre otros problemas.
Los beneficios que aporta su aplicación consisten en alivio del dolor, mejora de la función muscular, tratamiento eficaz de las afecciones de los músculos y el tejido conectivo y complementa perfectamente otras técnicas de fisioterapia como los masajes o los estiramientos.
Resultados inmediatos o a corto plazo
En función de la afección concreta para la que se realice el tratamiento, así como del propio paciente, los resultados de una sesión de punción seca, pueden variar. También influye en sus resultados la zona de aplicación y la severidad de la lesión, por lo que en algunos pacientes la mejoría puede ser inmediata, en tanto que para otros, deben realizarse varias sesiones antes de notar una mejora significativa.
Por lo general, los pacientes suelen experimentar una reducción del dolor y una mejora de la función muscular a partir de la primera sesión. Así como mayor flexibilidad y movilidad, tras recibir el tratamiento.
Uno de los campos donde más se aplican las punciones secas, es la fisioterapia deportiva, puesto que los deportistas suelen padecer todo tipo de afecciones musculares y del tejido conectivo. Atletas y deportistas en general reciben tratamientos de punciones secas, de forma habitual, lo que invita a pensar y demuestra que se trata de un tratamiento bastante eficaz.
Su aplicación en lesiones crónicas y agudas resulta muy valiosa para acelerar la recuperación y mejorar el rendimiento. Algunas de las aplicaciones más habituales dentro del campo de la fisioterapia deportiva, incluyen las siguientes dolencias:
- Lesiones musculares como distensiones o desgarros de los músculos. Habituales entre los que practican deporte de forma asidua.
- Lesiones del tejido conectivo como la fascitis plantar o la tendinitis.
- Los puntos gatillo que se forman en los músculos.
- Liberación miofascial para aliviar la tensión del tejido conectivo y con ello, mejorar la movilidad.
Esta técnica se utiliza, como ya hemos comentado, en combinación con otras como los masajes y estiramientos, de manera que se logra mejorar los resultados y acelerar la recuperación.
Dentro del campo de las punciones, existe otra técnica que no podíamos dejar de mencionar: la electro punción. En este caso, la técnica de la punción, recurre a la estimulación eléctrica para tratar las afecciones musculares y del tejido conectivo. Para su realización, se utilizan unas agujas muy similares a las que se utilizan para las punciones secas, pero en lugar de ejercer la presión de manera manual, se hace mediante la aplicación de una corriente eléctrica que se realiza a través de las agujas, con la finalidad de estimular los músculos y nervios implicados.
Aunque ambas técnicas son diferentes, es habitual que se utilicen de manera conjunta para el tratamiento de las lesiones musculares y del tejido conectivo. Al combinarse electro punción con punciones secas, se puede lograr una liberación de los puntos gatillos a niveles más profundos y mejorar más el flujo sanguíneo y linfático.
Las principales zonas de aplicación de estos tratamientos son los músculos del cuello y la espalda, dado que la tensión muscular y el dolor, se presenta muy a menudo en estas zonas del cuerpo. Son igualmente muy proclives a este tipo de tratamiento los músculos de la extremidad inferior como el muslo, la rodilla o los tobillos. La cabeza y la cara cuenta con infinidad de músculos que pueden beneficiarse de las punciones secas, como por ejemplo los de la mandíbula.
Un ejemplo de músculo en el que se pueden observar resultados inmediatos tras la aplicación de una punción seca, es el trapecio. Este músculo, de gran tamaño que se extiende desde la base del cráneo hasta la parte superior de la columna y los hombros, puede sentirse aliviado en unos pocos minutos tras la aplicación de la punción seca. Esta zona del cuerpo, suele mostrarse rígida y dolorida de forma frecuente, independientemente de que este lesionada o solo acumule tensiones. En tal caso, es más que recomendable combinar las punciones con estiramientos para maximizar los beneficios de las punciones y prevenir la recaída.
Este es solo uno de los músculos que pueden mejorar con las punciones secas. Lo mejor para saber si puedes beneficiarte de este tratamiento, es acudir a tu fisioterapeuta y que valore tu situación y el mejor tratamiento a aplicar.
